Tu vecina de abajo tiene un podcast

Vale, quizás estamos exagerando con esta afirmación, pero podría pasar. Y es que, sin duda, estamos metidos de lleno en la era del podcasting.

Siempre hemos sido un país “muy de radio”. Un consumo que hoy en día se mantiene con los 22 millones de oyentes diarios que indicaba el último EGM. Sin embargo, ¿qué pasa cuando no puedes escuchar un programa en el momento? Que lo escuchas en formato podcast, donde y cuando quieras.

Bajo esta premisa, podcasts como Nadie Sabe Nada ascendieron a la lista de los más escuchados de nuestro país, acompañados por casi tantos podcasts como temáticas podamos imaginar y haciendo que SER Podcast, proyectos producidos directamente por Spotify o plataformas como Podimo sean ahora una realidad a la hora de elegir entre cientos de podcasts disponibles.

Y quizás el éxito de podcasts como Deforme Semanal y, sobre todo, Estirando el Chicle (recibiendo dos premios Ondas ex aequo al mejor Podcast) provocó el actual auge de nuevos podcasts liderados por creadores digitales. Y es este punto sobre el que, tras buscar la lógica de lo que nos ha traído hasta aquí, queremos reflexionar hoy.

Parece que, de la misma forma que hace años la mayoría de influencers tenía un blog, ahora es el formato podcast el que está abriendo nuevas vías para, al igual que la radio, conectar de una forma más profunda y creíble con su audiencia. Y es que a través del formato podcast, los creadores de contenido están viendo una vía para expresar sus opiniones, crear comunidad y llegar a una audiencia que no por ser nicho en algunos casos, deja de ser fiel.

Esta semana hemos visto como Masterchef, programa que no necesita ningún tipo de presentación a estas alturas de la película, cuenta ahora con su propio videopodcast liderado por Lalachus y Gersanc para comentar los programas. Un formato similar por el que RTVE ya apostó el año pasado cuando puso a Carolina Iglesias (Estirando el chicle y ahora también Carolate) al frente del programa centrado en comentar el Benidorm Fest.

Llegados a este punto y con una oferta tan amplia, muchos opinan que la oferta de podcasts empieza a ser excesiva, pero lo cierto es que, frente a la batalla contra el algoritmo de Instagram y el auge de TikTok, tenemos podcasts para largo. Incluso HBO, reconocida por su apuesta por series y películas, ha incluido entre su oferta la opción de poder ver Nadie Sabe Nada desde su plataforma. ¿Y dónde entran las marcas en juego? Ya sea presentes en cuñas iniciales, al estilo de la radio, en menciones durante el podcast o creando sus propios podcasts (como es el caso de “Conversaciones de Bar” de Ambar junto a TAPAS) las opciones son muchas y muy interesantes. Y es que si los creadores de contenidos apuestan por el formato y los números salen, esta tendencia tiene que reflejarse en los planes de comunicación.