Te hacen sentir especial y se llama Marketing musical
¿Tú también alucinaste cuando el pasado fin de semana Billie Eilish te metió en sus “mejores amigos” de Instagram? No te culpo, todos caímos en la trampa del circulito verde, que nos hace sentirnos tan especiales. Y más si se trata de pertenecer al selecto club de close friends de un famoso.
Si no fuiste corriendo a Twitter a alardear de ello y te encontraste con que no eras el único, pues en cuestión de horas fue Trending Topic, siento ser yo quien te diga que todo fue una estrategia de marketing de la norteamericana para crear hype de cara al lanzamiento de su nuevo trabajo. Y lo consiguió. En tan solo un par de días la cifra de seguidores de su perfil en Instagram ascendía de 111 millones a 120.
Billie Eilish ya fue dejando pistas en sus redes sociales de que algo nuevo se avecinaba, como el cambio de su foto de perfil a un curioso color azul, que más tarde hemos relacionado con la estética del teaser de su nuevo videoclip. Pero sin duda alguna, esta última acción ha sido la guinda del pastel. Con esta estrategia, no solo ha conseguido poner el foco sobre ella y su nueva música o ampliar su número de seguidores, y por lo tanto, de posibles nuevos oyentes, sino que logró estrechar la relación con sus fans consiguiendo que la percibiesen como alguien cercano, como su “mejor amiga”, aunque solo fuese por un rato.
Cada vez son más los artistas que, como Billie Eilish, se suben al carro del factor sorpresa en sus estrategias de lanzamiento de nueva música. Algunos ejemplos de ello son: Shakira, que paralizó Times Square con un concierto gratuito anunciado horas antes en sus redes sociales; o Rosalía, que publicó un número de teléfono en un cartel de un supuesto restaurante delivery con el mismo nombre que una de las canciones de su nuevo disco. También los hay que se disfrazan de trabajador de Burger King o que convierten el probador de una tienda de ropa en una cabina donde escuchar su próximo single, como es el caso de Bizarrap. Y es que el lanzamiento de nueva música es un momento crucial en la carrera de un cantante, y una estrategia de lanzamiento bien planificada puede marcar la diferencia en términos de impacto y visibilidad.
Todas estas acciones de marketing, a cada cual más sorprendente, se explican por nuestra forma de consumo basada en “lo quiero, lo tengo” en tal solo un click y si no eres lo suficientemente atractivo como para captar mi atención en segundos, te hago desaparecer haciendo scroll. Nuestra necesidad de recibir constantemente estímulos ha terminado trasformado también el mercado musical. Los artistas caen en el saco del olvido si no sacan continuamente nuevos temas o si no publican contenido en sus redes sociales. La música se ha convertido en una competición donde la atención del público es un bien preciado y los cantantes necesitan y deben emplear estrategias de marketing inteligentes para destacar y mantenerse en el top de lo más escuchado.
Es irónico que, con estas hazañas “marketinianas” nos hagan sentirnos como si fuésemos especiales, haciéndonos creer que somos los únicos en pertenecer a sus mejores amigos en Instagram o que somos unos privilegiados por escuchar su música en exclusiva, cuando realmente son los artistas los que necesitan nuestra atención para tener en alza sus cifras. Billie Eilish, Shakira, Rosalía o Bizarrap y sus equipos de comunicación saben lo que hacen para sobrevivir en esta vorágine musical. ¿Quién da más? Mientras tanto, nosotros seguiremos esperando, porque a quién vamos a engañar, nos encanta sentirnos importantes para nuestros iconos.
