Me encanta esa tendencia de maquillaje, ¿llego a tiempo?

Eva Baena, Digital Client Executive, nos habla de la rapidez con la que las tendencias de maquillaje cambian y de cómo las marcas pueden aprovechar este entorno tan variable.

foto de Eva Baena

¿Has escuchado hablar de la tendencia de maquillaje coquette o mob wife? Si la respuesta es sí, llegas un poco tarde porque ya hay una nueva, el spanish look. Si la respuesta es no, ¿acaso no utilizas las redes sociales?

Es sorprendente que plataformas como Instagram y TikTok influyan en las tendencias y en nuestra forma de maquillarnos. Anteriormente, dependíamos de revistas de moda, desfiles o consejos de amigos, pero ahora tenemos acceso instantáneo a una infinita cantidad de vídeos de inspiración y tutoriales. Gracias a influencers y creadores de contenido, descubrimos productos virales y técnicas de aplicación.

También, es impresionante ver que algo tan simple como un vídeo de maquillaje pueda viralizarse y cambiar nuestra forma de maquillarnos. Por ejemplo, ha vuelto a ponerse de moda la tendencia 2016 que consistía en aplicar capas y capas de base, corrector, etc, en nuestra rutina diaria; lo cual es completamente opuesto a la tendencia que más triunfó durante 2023, conocida como clean look, también llamada “makeup no makeup”, que consiste en parecer que no llevas nada de producto en la cara aunque sí lo lleves.

Las tendencias cambian a un ritmo tan vertiginoso que, si las marcas quieren subirse a ellas, probablemente lleguen tarde, ya que para cuando tengan tiempo de reaccionar otro nuevo trend será viral. Entonces, ¿cómo pueden luchar las marcas en este nuevo entorno digital? Una estrategia clave es colaborar con influencers y darles la libertad de crear looks acordes a la tendencia viral del momento. Otra táctica sería crear contenido para las propias redes de la marca, con un community manager que se una al trend. El último paso sería monitorear las redes e intentar adelantarse creando su propia tendencia para así conseguir que seguidores e influencers se unan.

Además, las marcas pueden aprovechar las redes sociales para realizar encuestas y preguntar a su audiencia qué les gustaría ver o qué productos están buscando. De esta manera, pueden adaptar sus estrategias de marketing y lanzamiento de productos para satisfacer las necesidades y deseos de su público objetivo.

En resumen, las redes sociales han cambiado la forma en la que interactuamos con el maquillaje, desde cómo descubrimos nuevas tendencias hasta cómo compramos productos. Para las marcas de maquillaje, adaptarse a este nuevo panorama digital significa aprovechar al máximo las oportunidades que ofrecen las redes sociales, ya sea a través de colaboraciones con influencers, contenido original o adelantándose y creando sus propias tendencias.

Para acabar, y como opinión personal, considero que las tendencias de maquillaje suelen ser más seguidas por las propias influencers para reinventarse que por el consumidor. Al final, como consumidoras cada una tenemos nuestro estilo, y si nos inclinamos más hacia un estilo “coquette” es probable que utilicemos tonos rosas, aunque lo llamemos por otro nombre.